Uno de los grandes testimonios de la revolucionaria tecnología minera de mediados del siglo pasado es la Pala Mundial, que llegó al mineral de Chuquicamata en 1949 y que prestó servicios de extracción minera hasta el año 1971, siendo reemplazado por tecnología más moderna de la época. Tiene un peso de 800 toneladas y una altura de 27 metros.
En la década de los `50 fue considerada la más grandes a nivel mundial, de allí su nombre.
Esta pala era la encargada de cargar con minerales el tren que llegaba arrastrando los carros hasta el rajo desde donde se extraía el tesoro rojo para ser transportado a las plantas de procesamiento y particularmente a la fundición.
Esta pala, es hoy un verdadero monumento, que acapara la nostalgia de los viejos chuquicamatinos que han tenido la oportunidad de reencontrarse con ella.. Este gigante, es un mudo testimonio de la historia de ese gran mineral del norte con más de 100 años de valiosa y generosa producción.
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