El hospital que llegó ser calificado como el más avanzado del Continente Sudamericano, el “Roy. H. Glover” de Chuquicamata, campamento minero ubicado en la Región de Antofagasta, terminó finalmente hace dos décadas sepultado por millones de toneladas de ripio, material estéril extraído desde el mineral.
Este centro asistencial fue inaugurado en 1960 y, fue uno de los primeros recintos de salud en Chile en contar con ascensores.
Su imponente construcción comenzó su agonía arquitectónica a partir del año 2001 y, hasta el 2003, cuando la chimenea del crematorio comenzó a desaparecer lentamente ante los ojos de quienes acudían a visitarlo como un son de despido.
¿QUIÉN FUE ROY H. GLOVER?
Roy H. Glover, fue un abogado norteamericano y Presidente en 1955 del Directorio de la Anaconda Copper Mining Company. Glover, sucedió en el cargo a Cornelius F. Kelly.
Un año antes de asumir en el Directorio (1954), Glover siendo Vicepresidente de la Junta Directiva de Anaconda Copper Mining Company, hizo suyo el proyecto de construcción de un gran hospital para Chuquicamata, puesto que esa ciudadela iba en franco crecimiento y no se equivocó.
Glover, tuvo la gran y tarea de convencer al resto del directorio del por qué era necesario contar con un hospital de última generación y, financiar su construcción por US$ 28 millones de la época.
Glover, murió antes de que concluyera su construcción y fue así, que por unanimidad, se decidió que llevara su nombre, el que hoy sólo es historia, porque este centro asistencial al ser trasladado a la ciudad de Calama, lleva por nombre: “Presidente Salvador Allende Gossen”. (fotografías: Antonio Ivanovic Palmarola.)