A fines de octubre y en línea con las proyecciones iniciales, la minera canadiense Teck espera alcanzar el peak de dotación con 8 mil trabajadores para la construcción de Quebrada Blanca 2, que en marzo de este año y a raíz del Covid-19 quedó paralizado momentáneamente, reactivándose las faenas en forma paulatina y, a medida que la situación era más conocida y controlable, llegando a registrar a julio, 4 mil trabajadores.
Los protocolos se han intensificados, como también, hay más exigentes barreras sanitarias, pruebas selectivas de Pcr entre los trabajadores y otros enfocados a mantener bajo control cualquier foco que pueda surgir como consecuencia del Covid-19.
La paralización del proyecto y la paulatina reactivación del mismo, ha ocasionado un retroceso de la construcción de aproximadamente 5 meses; de allí que para fines de año se espera tener un avance del 40 por ciento de las obras.
Aunque el actual campamento de Quebrada Blanca 2 está preparada para recibir a los 8 mil trabajadores, deberá construir otros, con un costo que fluctúa entre los 25 y 40 millones de dólares y, que, de no ser por el Covid-19, no se hubiesen requerido.
EL PROYECTO
El Proyecto Quebrada Blanca Fase 2 es uno de los recursos de cobre no desarrollados más grandes del mundo.
Cuandoentre en operaciones, será un activo de primera clase, con bajos costos operativos, una vida útil inicial de la mina de 28 años y un significativo potencial de crecimiento adicional.
Aunque la primera producción de cobre está prevista para el segundo semestre de 2021, esta se verá atrasada como consecuencia de la forzosa paralización por razones sanitarias.
LA PROPIEDAD
Teck posee una participación indirecta del 60% en Compañía Minera Teck Quebrada Blanca SA, propietaria de Quebrada Blanca 2. Sumitomo Metal Mining Co., Ltd. junto a Sumitomo Corporation tienen una participación colectiva indirecta del 30% en Quebrada Blanca S.A.;Mientras que la estatal chilena Enami, tiene 10% de participación.
