Claro, contundente y con sólidos argumentos, fue la ponencia ante la Comisión de la Cámara de Diputados, del ex Vicepresidente de Cochilco y hoy Director Ejecutivo de Aprimin, Sergio Hernández, quien enfatizó que desde hace 16 años el rotalty minero existe en el país y que no procedería legislar hoy sobre lo mismo, sosteniendo incluso que jurídicamente es improcedente.
Hernández, sostuvo que establecer nuevas cargas tributarias, terminará por dañar la imagen como un país serio y respetuoso de las inversiones; por lo que terminará afectando el crecimiento económico y, la falta de oportunidades a través de los empleos que el sector genera.
También, hizo hincapié que un nuevo royalty terminará más temprano que tarde, afectando los ingresos económicos que ingresan por este concepto a las arcas fiscales.
En cuanto a la tasa del actual royalty, recordó que ésta es progresiva en función del crecimiento del margen operacional de las compañías mineras .
También dejó de manifiesto la reciente encuesta del Instituto Fraser, el que estableció el descenso de Chile al lugar 30% del rancking mundial como nación confiable para las inversiones, siendo sorpresivamente superado por Colombia; cuando hace algunos años el país ostento el sexto lugar por su seriedad y estabilidad.
Terminó diciendo que tenía la convicción de que el país no está en el mejor momento para nuevos tributos como el planteado y, que lejos de favorecer los ingresos fiscales , éstos, por el contrario se verán seriamente dañados en instantes en que hoy, más que nunca se requieren para responder a las demandas establecidas en la Agenda Social de la nación.