Cada día son más las mujeres que buscan ampliar su campo laboral y se sienten atraídas por industrias y trabajos en los que históricamente se han desempeñado hombres. Es en esta línea que cinco nuevas jóvenes se unieron al contrato que mantiene Finning con Minera Escondida. Con esta incorporación serán 14 las trabajadoras que desempeñarán labores en dependencias de ese contrato minero y en instalaciones de Finning en Antofagasta.
Nataly Rojas, es una de estas jóvenes que entró como parte del equipo de Finning en Escondida. Ella comparte que desde muy pequeña sintió la vocación por las carreras Stem y fue así como, a medida que fue creciendo, sus elecciones la llevaron a optar por la mecánica. En tercero medio realizó un primer curso de capacitación en el Finning Instrucción Técnica de Antofagasta y desde entonces ha continuado estudiando y perfeccionándose.
Nataly destaca que no le teme al desafío de ingresar a roles históricamente masculinizados, pues está convencida que trabajar en conjunto permite “aprender a respetarnos no tan sólo como seres humanos, sino también nuestras ideas, pudiendo complementarnos para desempeñar nuestros objetivos incorporando distintas miradas”.
Fernando Valdés, Gerente contrato Finning en Minera Escondida, señala: “Estamos muy contentos con la incorporación de estas colaboradoras, ya que para nosotros es clave la incorporación de talento femenino, siendo ellas un gran aporte a nuestro equipo. Tenemos experiencia al trabajar con mujeres, y han contribuido desde su compromiso con nuestros estándares preventivos y operativos y por supuesto, con la calidad de sus competencias. Nuestras puertas están abiertas y esperamos seguir potenciando nuestro equipo con el poder femenino.”
La incorporación de este equipo de mujeres mecánicas es una muestra más de los resultados concretos de Finning en su viaje de inclusión y diversidad, donde ha abierto espacios para mujeres en la industria por medio de distintas acciones, como la entrega de capacitación, habilitación de infraestructura, incorporación de vestimenta y elementos de protección personal adecuados a cada género, logrando un cambio cultural en líderes y colaboradores que comprenden el valor de trabajar en ambientes respetuosos y comprometidos con la diversidad.