El renio es un elemento químico de número atómico 75, ubicado en el grupo 7 de la tabla periódica. Es un metal de transición, pesado, blanco y brillante, con propiedades únicas que lo hacen valioso para diversas aplicaciones industriales.
Es impresentable que siendo Chile el primer productor de renio del mundo no se sepa de la importancia y el desarrollo que conlleva, no existe una política pública para fomentar la investigación científica y tecnológica para mejorar la recuperación del Renio.
Se encuentra en pequeñas cantidades en la naturaleza, principalmente en minerales de cobre y molibdeno. Algunas de las fuentes naturales más comunes del Renio son:
1. Minerales de Cobre: El renio se encuentra en minerales de cobre como la calcopirita (CuFeS2), la bornita (Cu5FeS4) y la covelita (CuS).
2. Minerales de Molibdeno: El renio también se encuentra en minerales de molibdeno como la molibdenita (MoS2).
3. Minerales de Uranio: El renio se encuentra en minerales de uranio como la uraninita (UO2).
4. Rocas ígneas: El renio también se encuentra en rocas ígneas como el granito y el basalto.
5. Depósitos Hidrotermales: El renio se encuentra en depósitos hidrotermales, que son depósitos minerales formados por la acción de agua caliente y rica en minerales.
Dentro de algunas aplicaciones del Renio se encuentran las siguientes:
a) Para aleaciones de alta resistencia: Se utiliza para fabricar aleaciones resistentes al calor y a la corrosión, amplia demanda mayormente en la industria aeroespacial y en turbinas de gas.
b) En filamentos de lámparas: Los filamentos de lámparas incandescentes y de halógeno contienen renio para mejorar su resistencia y durabilidad.
c) Resistencias eléctricas: Debido a su alta resistencia eléctrica, se utiliza en la fabricación de resistencias para hornos y otros dispositivos.
d) En catalizadores: El renio se utiliza como catalizador en procesos químicos, especialmente en la producción de plásticos y fertilizantes.
e) En medicina: Se utiliza en algunos tratamientos médicos, como en la radioterapia para tratar el cáncer.
f) Industria nuclear: Se utiliza en algunos reactores nucleares debido a su capacidad para soportar altas temperaturas y radiación. Aquí la demanda se ha incrementado exponencialmente.
g) Investigación científica: El renio se utiliza en experimentos científicos, especialmente en física de partículas y estudios de materiales. Se empleó en las pruebas para identificar la partícula de Dios Boson de Higgs del centro de estudios de partículas CERN.
El Renio es un metal refractario obtenido principalmente de los residuos de la industria del cobre y del molibdeno. Su recuperación se realiza mediante procesos metalúrgicos y químicos.
La recuperación de renio se puede hacer mediante procesos metalurgias tales como:
a) Procesamiento de minerales: Se extraen minerales que contienen renio, como la molibdenita que está asociado al cobre.
b) En procesos de fundición: Se calientan los minerales a altas temperaturas para producir concentrados ricos en renio.
c) Electrorefinación: Se utiliza un proceso electrolítico para separar el renio de otros metales.
d) En la cristalización: Se disuelve el renio en ácido nítrico y luego se cristaliza para obtener renio puro.
e) En la recuperación de residuos: Se recupera renio de residuos industriales, como catalizadores y equipos desechados que hoy cobra mayor fuerza por la emergente industria del reciclaje.
Pero también la recuperación de renio también se puede realizar mediante los siguientes procesos:
– Reciclaje de materiales de desecho.
– Procesamiento de cenizas volantes.
– Tratamiento de aguas residuales industriales.
El precio actual del renio fluctúa entre $2,500 y $3,000 por kilogramo, lo que lo convierte en uno de los metales más valiosos del mundo, superando incluso el valor del cobre por más de 300 veces. Este precio se debe a su alta demanda en la industria aeronáutica, espacial, generación energía nuclear y petroquímica, donde se aprovechan sus propiedades de resistencia a altas temperaturas y dureza.
Se vende generalmente en forma de productos intermedios, como:
1. Polvo de Renio: Utilizado en la fabricación de componentes para turbinas de gas y motores de avión.
2. Barras de Renio: Empleadas en la producción de aleaciones y componentes resistentes al calor.
3. Alambre de Renio: Utilizado en aplicaciones de alta temperatura, como filamentos de bombillas y componentes electrónicos.
4. Aleaciones de Renio: Mezcladas con otros metales para mejorar sus propiedades mecánicas y térmicas.
Según un estudio de Cochilco el principal productor de Renio primario del mundo es Chile (50% aprox.), seguido por Estados Unidos y Polonia (16% cada uno aprox.). Indican que hay que señalar que la producción primaria no necesariamente se asocia a minas ubicadas en los países productores, sino que dependerá de la ubicación de la capacidad instalada para el tratamiento de la molibdenita.
El estudio, que data del año 2016, señala que “la producción anual de renio primario es del orden de los 50.000 kg, mientras que el reciclaje alcanza los 10.000 kg. El renio se transa en su mayoría en contratos de largo plazo (de 5 a 10 años) entre el productor y el comprador”.
Según Strategic Metals Invest el precio actual (30 de septiembre de 2024) del Renio es $ 2,489.00 por kg. Este precio el Renio ha variado un +24,76% desde principios de 2024 y ha subido un +54,92% desde el año pasado. Este metal estratégico ha subido un +77,15% en comparación con su precio de 1.405 dólares por kg el 1 de enero de 2021. Desde el 1 de enero de 2020, el cambio de precio es del +45,43%. Si nos remontamos más años al 1 de enero de 2018, cuando el costo del Renio era de 2.118,90 dólares por kg, entonces el cambio es del +17,47%.
Si bien hay varias compañías mineras que lo producen como Codelco a través de su planta Molyb, en Andina y El Teniente; Minera Escondida que tiene los mejores índices de contenido en sus depósitos, Collahuasi y Molymet, debo aclarar que el renio es un subproducto del proceso de tostación de la molibdenita, claramente relacionado con la producción de cobre.
Sin embargo, también sabemos que más que olvidado en algunos casos sale escondido en el concentrado de cobre, sin que el comprador pague por él. Es decir, Chile regala su molibdeno y otros ricos minerales contenidos en la exportación de sus concentrados de cobre.
Si bien es un tema complejo y por el que se ha indicado que los compradores no tienen la capacidad de procesarlo, por ende, no se les cobre, considero importante que se haga una nueva revisión de los minerales, que hoy son considerados críticos o de importancia para el mundo; y que se cobre por ello, ya que eso significa más divisas para las empresas y por ende para Chile.
Es un tema país del cual tanto productores como autoridades deben hacerse cargo. Si miramos los usos, si analizamos el mundo en el que estamos viviendo; donde incluso hablamos ya de minería espacial; de mejorar la eficiencia energética, de reducir emisiones y contaminación; de avances en tecnologías médicas y fortalecer la seguridad y defensa; áreas en la que el Renio es fundamental, entonces, ya es tiempo de ponernos serios y legislar las trazas y minerales que van contenidos en los concentrados que se exportan a potencias que tienen la tecnología para su recuperación. ¿Y si compramos esa tecnología?
Espero que el Renio no quede prisionero como nuestro litio, que ha perdido la oportunidad de hacer crecer al país por declararlo un mineral estratégico que para temas nucleares no lo es.
“Incluso una decisión correcta es incorrecta cuando se toma demasiado tarde”.
Lee Lacocca